Ser profesor es seguramente una de las profesiones más difíciles, pues lidiar con niños, adolescentes y jóvenes es como una misión imposible; y no, no siempre los alumnos necesitan la motivación adecuada, simplemente algunos de ellos viven en otro planeta y la escuela y los estudios son un cero a la izquierda.
Estos profesores, y estos testigos, contaron las anécdotas más graciosas sobre los alumnos a los que, digamos… mmm, les falta un poco de oxígeno.