Si nunca has experimentado esa emoción cuando terminas de limpiar tu casa y puedes ver que todo brilla como nuevo, entonces este artículo NO es para ti. Pero, si abriste este link y estás intrigado por saber qué es lo que contiene es probable que seas tan maniático/a de la limpieza como nosotros.
A continuación te presentamos una lista de situaciones que seguramente te hacen sumirte en un placer inimaginable; y es que, aunque cualquier persona común y corriente se emociona por otra cosa, tú sientes esa emoción después de limpiar algo y ver la diferencia entre el antes y el después (si eres como yo, tal vez hasta le has tomado foto).
1. Cuando tu estufa queda rechinando de limpia
2. Por fin, tu clóset está perfectamente ordenado y que ¡nadie se atreva a mover nada!
3. Lograste limpiar algo que no sabías que estaba sucio
4. Tus ventanas están tan limpias que ¡ni siquiera parece que hay una ventana!
5. ¿Es un espejo o tienes una hermana gemela que no conocías?
6. Cuando descubres ese truco secreto para limpiar esas manchas difíciles de sacar… ¡y funciona!
7. Cuando te das cuenta que tu regadera aún funciona a la perfección
8. ¿Qué me dices de cuando logras quitar todo el moho de los azulejos del baño?
9. Cuando tu cocina queda impecable y lo último que quieres es que a alguien le dé hambre
10. Nada se compara a esa sensación de tener tu casa totalmente limpia, ahora sí, ¡a relajarse!
