Quizá te parezca que salir a rodar en bicicleta no es más que una moda hipster que solo practican los jóvenes que quieren aparentar llevar una vida sana y sustentable con el medio ambiente. Pero ¿y si en realidad pedalear un par de minutos sí beneficia tu cuerpo de manera sorprendente? Quítate los tabúes y la flojera porque después de conocer sus múltiples beneficios irás corriendo a reparar ese viejo y subestimado vehículo que has dejado olvidado en el garaje durante años.
Si para evitar la contaminación o ahorrarte unos cuantos pesos en gasolina y pasaje prefieres llegar caminando a tus diferentes destinos, permítenos felicitarte; pero, sin afán de quitarte el mérito, reconozcamos que a veces hay que recorrer larguísimos trayectos. ¡Con una bici no solo llegas más rápido! Expertos aseguran que es mucho más sano que caminar.
1. Dile adiós al estrés en tu vida
Ya sea que tu tensión esté causada por problemas personales o laborales, si tomas paseos sobre ruedas de vez en cuando tu mente se despejará, te relajarás y te será más sencillo tomar decisiones sin darle tantas vueltas al asunto. ¡Verás lo bien que se siente darte un respiro y rodar libremente! El 52 por ciento del estrés que has acumulado durante años desaparecerá si te transportas en bici al menos cuatro veces a la semana. Y lo mejor es que los resultados no tardarán en reflejarse.
2. Beneficios en tu salud
Andar en bici es una de las pocas prácticas que ejercitan casi todo el cuerpo. Cuando te decidas a cambiar las ruedas de coche por unas ligeras llantas sobre las cuales pedalear, comenzarás a prevenir enfermedades cardiovasculares comunes. Además, tus huesos y articulaciones gozarán de fortaleza y elasticidad por mucho más tiempo. ¡Te sentirás más enérgico que nunca!
3. Cuidas tu figura y, de paso, al planeta
Con el uso diario de la bicicleta no solo reducirás el consumo de CO2 que tanto contamina el medio ambiente (aunque no lo creas, un motor menos circulando hace una diferencia abismal), también tonificarás tus músculos y poco a poco moldearás tu figura como la de todo un ciclista. ¡Qué esperas para rodar!
