¿Te han dicho que te pareces mucho a un miembro de tu familia aunque no sea precisamente tu madre o padre? ¿Eres el clon de tus hermanos o el vivo retrato de tus abuelos? Las maravillas de la genética son tan complejas e inesperadas, que hay cosas que no pueden suponerse por mucho que la ciencia y la tecnología hayan avanzado, como el parecido que tendrá un bebé que viene en camino. Pero seguramente has escuchado alguna vez que hay genes que predominan, y dependiendo de qué progenitor provenga, se heredarán facciones, color de ojos, tipo de cabello y hasta el carácter (si, tu mal genio se lo debes a alguien más).
El creativo proyecto fotográfico y de edición digital que conocerán a continuación, estuvo a cargo del fotógrafo canadiense Urlic Collette, un chico al que se le ocurrió comparar los rostros de parientes tanto cercanos como lejanos, ya sea de generaciones distintas o incluso de la misma edad, para mostrar la fuerza que tienen herencia genética impresionante. La caprichosa similitud con algunos familiares nos pueden sorprender, literalmente, ¡son como gotas de agua!
1. Madre e hija, 61 y 32 años
2. Padre e hijo, 53 y 28 años
3. Hermanas, 19 y 16 años
4. Hija y madre, 35 y 64 años
5. Abuela y nieta, 61 y 12 años
6. Hermanos, 30 y 29 años
7. Hermanas, 16 y 15 años
8. Hijo y padre, 7 y 29 años
9. Gemelas, 20 años
10. Hermana y hermano, 20 y 25 años
11. Hija y padre, 10 y 32 años
12. Hermanas, 24 y 30 años
13. Primos, 25 y 27 años
14. Tía y sobrina, 57 y 32 años
15. Mellizos, 29 años
