“Ahora que mi niña tiene dos años, su interés por el arte se ha disparado, sobre todo cuando me ve pintando. A medida que crece espero poder colaborar con ella en muchos proyectos, pero hasta entonces me he decidido a ver lo que puedo crear con algunos de sus muchos bocetos. En todas nuestras colaboraciones al empezar, mi hija crea su propio boceto con una pluma de tinta, boceto que luego convierto en una pintura de acuarela. El boceto lo hace completamente sola, sin ninguna instrucción dada de mí, yo simplemente uso su creatividad para inspirarme y crear una pintura.
“Trato de trabajar rápidamente y dejar que la imaginación y el juego se arraigue en la pintura, en lugar de tomarlo seriamente; de esta manera puedo estimular la contribución de Eva sin hacerlo tan adulto. Me siento bendecida de que mi hija me pueda recordar una vez más lo que es pintar como un niño al dejarme ver a través de sus ojos”. Ruth Oosterman
1. El sueño de un ratón de biblioteca
2. La princesa girasol
3. El rey Elefante
4. El gran búho
5. La Reina
6. La Dama y el Zorro
7. El Ciervo
8. El barco rojo
Oosterman explicó cómo tomó algunas acuarelas y trató de imaginar lo que su hija podría haber estado viendo; y su primer cuadro, “El Barco Rojo,” volvió a la vida.
Pintando con su hija deja sus técnicas por fuera de su zona de confort, explicó, obligándose a ceder el control y pensar de forma creativa
La artista vende las impresiones de sus colaboraciones en Etsy, y dice que todas las ganancias irán a fondo para la universidad de Eva.
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